En tu visita a Brihuega, el Castillo de la Piedra Bermeja es uno de los lugares imprescindibles. Se trata de una fortaleza construida entre los siglos X y XI por los árabes, en lo alto de una roja rojiza. Un edificio imponente que desde el año 2020 está incluido en la Red Nacional de Patrimonio Histórico, dentro de la categoría de castillos y palacios.
En su origen un hondo foso separaba el castillo de las casas por un lado; por otro se levantaba una muralla y por los lados oriental y meridional se abría al valle del Tajuña. Sin lugar a dudas un emplazamiento estratégico que hoy día nos regala unas vistas maravillosas.
En el siglo XIII el castillo se reconvirtió en palacio-fortaleza con un uso residencial y religioso, estando bajo el señorío de los obispos de Toledo. En esta época se ampliaron y redistribuyeron algunas estancias, plasmando la impronta del gótico y el estilo nórdico que gustaba al obispo Ximénez de Rada.
En el XVI la fortaleza fue abandonada, sufriendo las consecuencias de la Guerra de Sucesión de 1710. Entre 1932 y 1845 se utilizó como cementerio municipal.
Ya en los últimos años se ha ido rehabilitando progresivamente algunos espacios, la sala de caballerizas y su fachada.
Además de formar parte de la Red Nacional de Patrimonio Histórico, el Castillo de la Piedra Bermeja forma parte de la Asociación y Club de Producto Turístico de Castillos y Palacios de España.
Datos de interés
📍 Está ubicado en la Plaza de Manu Leguineche de Brihuega.
➕ Más información sobre el castillo.
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